El denunciado fue traslado desde la Comisaría Tercera de Roca a la unidad de Mainqué luego de que en enero de este año un detenido denunciara que había sido salvajemente golpeado por uniformados. Si bien la causa aun está en proceso, en ese momento se resolvieron los movimientos de personal.

Ahora, a cinco meses de asumir en la Unidad 66 surge esta denuncia que lo involucra directamente.

En la denuncia enmarcada en todas las leyes sobre violencia de género, la mujer pide que su superior «se abstenga de realizar actos que la perturben o intimiden».

Según trascendió, el denunciado tendría problemas con el personal a consecuencia de reiterados episodios de malos tratos verbales que incluyen gritos. En alguna ocasión habría llegado a ingresar a los calabozos a «enfrentar» a detenidos.