Argentina retrocedió y mucho en la lucha contra la pandemia de COVID-19 y en Casa Rosada hablan de medidas sanitarias, mientras evitan hablar de “toque de queda”. Hoy al mediodía habrá reunión virtual con mandatarios provinciales. Participará la Gobernadora Carreras.

En Río Negro fallecieron 34 personas en apenas cuatro días. Los casos activos treparon a 3.365 y el total de fallecidos se acerca lentamente a una cifra impensada: mil muertos en menos de un año.

Hay ciudades muy complicadas, como Bariloche con más de 1.200 casos activos y Viedma, que va camino a superar nuevamente los 500 casos.

Surgió el rumor de un cierre total de actividades entre las 23 y las 6 de la mañana, para evitar las reuniones de los jóvenes.

Preocupado por la situación nacional, Alberto Fernández decidió convocar a los gobernadores a una reunión virtual de emergencia, con el fin de analizar nuevas medidas sanitarias para combatir el avance del coronavirus.

Después de las marchas, los encuentros de fin de año y las Fiestas, los registros oficiales sanitarios de los últimos días indican que se avecina una nueva etapa de la pandemia de COVID-19.

Según fuentes oficiales, “todos” mostraron miradas “muy coincidentes” en cuanto a la “preocupación” por la situación. “Ven a la gente muy indisciplinada y agresiva ante el reclamo de las autoridades para que respeten protocolos”, informaron.

En el Gobierno evalúan medidas tendientes a restringir las actividades sociales nocturnas, pero prefieren evitar utilizar el concepto de “toque de queda”. Es así que en Casa Rosada y en Olivos se habla de “restricciones sanitarias”, “cierre nocturno” y “control diurno de las fuerzas de seguridad”.

El objetivo principal de estas iniciativas, que aún no están confirmadas y dependerán, en parte, del resultado del diálogo con los gobernadores, será impedir las aglomeraciones, en especial en sitios de esparcimiento vacacional veraniego, como playas.

Mientras tanto, en las ciudades se buscará evitar que haya reuniones sin cuidados como distanciamiento social o uso de tapabocas en lugares de encuentro privados, como bares y restaurantes, pero también públicos, como plazas. Las imágenes de los encuentros en parques abiertos en Nochebuena y Año Nuevo, encendieron las alarmas sobre este tipo de reuniones lugares públicos como focos de encuentros masivos.