El juez Gustavo Ravizzoli ha generado consternación al dictar prisión domiciliaria a Jerez Lautaro Emilio, uno de los cinco acusados del abuso sexual grupal a Silvia Cabañares, cuyo posterior femicidio dejó una herida abierta en la sociedad.

La rapidez con la que se llevó a cabo la audiencia, notificada un viernes y realizada ese mismo día, junto con la resolución emitida pasadas las 20 horas, levanta sospechas sobre la transparencia del proceso judicial.

El argumento esgrimido por la justicia, basado en las supuestas pésimas condiciones de detención de Jerez, frente a la realidad deplorable que enfrentan numerosos internos en las cárceles. En lugar de abordar estas condiciones, se opta por una medida que no garantiza la seguridad pública ni el avance de la investigación, sino que parece allanar el camino hacia la impunidad.