Un hecho poco usual ocurrió este fin de semana en una familia roquense. Resulta que uno de los hijos robó un vehículo, llevó las cosas a su casa y cuando su padre lo descubrió, llamó a la policía y entregó los objetos. 

Esto ocurrió el pasado fin de semana, cuando un muchacho decidió incumplir la ley y se llevó distintas pertenencias que se encontraban en el interior de un vehículo estacionado en Barrio Nuevo. 

Luego de cometer el delito, al joven le pareció una buena idea esconder las pertenencias robadas en su casa, asique se dirigió hacia allí, dejó el motín y se fue nuevamente. 

Pero evidentemente, no contaba con que su padre revisara dichas pertenencias y se diera cuenta que no eran propiedad de su hijo. 

Ante esta situación, el hombre inmediatamente llamó a las autoridades policiales a quienes les entregó lo sustraído. 

El joven, que ya había sido detenido por la policía, continuó demorado para más averiguaciones. Y la víctima del robo recuperó sus pertenencias en tiempo record.