La Asociación Patagónica de Síndrome de Down (APASIDO), organiza una charla abierta sobre salud con el pediatra especializado Eduardo Moreno Vivot. Además de presentar el libro “Más allá de lo que ves”, el médico expondrá su enfoque sobre como trabajar, relacionarse y permitir que una persona con síndrome de Down desarrolle todo su potencial.

La conferencia se realizará el 5 de noviembre en la sede de la Fundación Cultural Patagonia (San Luis 2080 de General Roca), a partir de las 15.30. Las inscripciones ya están abiertas y tienen un cupo limitado. El arancel tiene un valor de 2.000 pesos y las reservas pueden realizarse comunicándose con los teléfonos celulares: 298 – 450 2226 / 299 – 408 2098.

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En su libro, Martínez Vivot plantea un recorrido por la vida de las personas con síndrome de Down, para que la sociedad las conozca a través de sus distintas áreas (salud, trabajo, espiritualidad, deporte, sexualidad , envejecimiento, etc.); y mostrar que, si se las acompaña, pueden llegar lejos.

Para este pediatra, hay que derribar algunos prejuicios que todavía persisten en la sociedad, como que una persona con Síndrome de Down permanece eternamente en una etapa infantil. “Tenemos que cambiar ese concepto, porque los infantiliza. Y son bebés, adolescentes, adultos; en cada etapa de su vida. Personas que, si se imparten una educación y aprendizaje adecuados, se volverán autónomas”, remarcó.

Explicó que se puede trabajar muy bien en un taller o en un gabinete con las personas con síndrome de Down y sus familias. Pero al salir a la calle, se encuentran con una sociedad que las mira extraño y tratan diferente. “Por ejemplo, si alguien con síndrome de Down está en un restaurante con su familia, el mozo no le pregunta directamente qué es lo que quiere comer, sino que se lo pregunta a los padres. Y ese es el cambio que debemos hacer como sociedad”, dijo.

“Una vida digna. Ese es el único tratamiento. Cuando nace un bebé con síndrome de Down, lo primero que escuchan los padres es que busquen especialistas para hacer terapia y estimulación temprana. Paren, frenen. La primera acción debe ser acoger al hijo, porque cualquier persona, con síndrome de Down o no, debe ser acogido. Si no, no se va a desarrollar. Y después se verá en cada situación particular qué necesita y con qué frecuencia”, expresó Moreno Vivot.

A los padres les aconsejó que tengan confianza y aprendan a conocer a sus hijos, que los llamen por sus nombres y que no corran, ya que las personas con Síndrome de Down tienen su propio tiempo. Así, comentó que cultivarán la virtud de la paciencia y aprenderán a esperar, disfrutando cada avance que tienen.

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