Fue una noche soñada para Christian ‘El Potro’ Luis, un chico de barrio, de las 827 viviendas, familiero, que creció rodeado de amigos, logrando basar gran parte de su fortaleza en sus afectos. Ayer, tuvo una de las peleas de su vida y logró imponerse con claridad, ante su rival Gerardo ‘El niño de hierro’ Mellado, en Valdivia, Chile. Ganó por nocaut en el segundo asalto y conquistó el cinturón que lo acredita como campeón sudamericano crucero «Fedebol WBA (World Boxing Association)». Ahora, acrecentó su récord con 11 triunfos (7KO) y 4 caídas. 

Se llevó el respeto, aplausos, reconocimiento y felicitaciones de todas las personas presentes en el gimnasio «Las Ánimas», e incluso del relator y la comentarista del gran evento boxístico. 

Christian realizó una muy buena pelea, demostrando un grandísimo nivel, entregando absolutamente todo, venciendo por KO en el minuto 2:53 del segundo round (en una pelea que estaba pactada para 10 asaltos) a su rival, Gerardo Mellado. Anteriormente, en el mes de septiembre, el púgil chileno se había quedado con el título de campeon chileno en categoría crucero. En la previa a la gran velada, ambos boxeadores pasaron por la balanza, ‘El niño de hierro’ Mellado registró 89,8Kg, mientras que el roquense marcó 89,5Kg.

‘El Potro’ logró moverse muy rápido por todo el ring y también lo fue en el intercambio de golpes. Golpeó muy fuerte durante el primer asalto y no le dejó espacios al boxeador trasandino para que pudiese sentirse cómodo, ni tampoco realizar acciones claras. Demostró un gran estado físico en la descarga de golpes, que le permitió tirar dos veces a su rival, primero cayendo en el medio de la lona y luego contra una de las esquinas del ring.

Luego del enorme triunfo en la ciudad de Valdivia, ubicada en la zonar sur de Chile, tuvo el momento para dedicar sus primeras palabras, como flamante ganador del título sudamericano peso crucero:

«Primero quiero agradecer a toda la gente de Chile, de Valdivia, porque fueron muy buenos con nosotros. Desde el principio nos trataron muy bien, también a los chicos de la promotora por invitarnos, a Alejandro Concha que se hizo cargo de esto y a Mellado que es un gran rival. Me ganó en su momento (nueve años atrás, también en Valdivia) y hoy fue una revancha conmigo mismo, para demostrarme que la disciplina lleva al crecimiento y hay que soñar a lo grande». 

Christian ‘El Potro’ Luis siempre remarca la importancia de quienes lo alientan y esta vez, no fue la excepción:

«Gracias y bendiciones a toda mi familia, mi novia, mi mamá, mi papá, mi familia de General Roca, mi técnico Iván (Carrasco), Félix (Marín; preparador físico), Rodrigo Ceballos (kinesiólogo), tengo un gran equipo. Caro Palmero, mi hermanita, que Dios la bendiga, la amo muchísimo, Naty Cardenas, mi coach mental, que la verdad fue un antes y un después, la cabeza hay que tenerla sana en esto».

En cada una de sus peleas en la ciudad el cariño de la gente siempre está y se hace notar. Cada vez que camina hacia el ring el público explota, y lo mismo sucede a través de las redes cuando es visitante. Por ese motivo, también se acordó de todos, con su brazo izquierdo en alto y su puño derecho sobre el corazón, dijo:

«A mi gente de Roca que me está mirando, los amo. Gracias por el aguante de siempre, a la banda de Roca que vino, para las 827 que es mi barrio y lo tengo tatuado». Con el paso del tiempo se convirtió en un reconocido boxeador profesional y es muy querido por la gente. 

Unos días antes de la gran noche, Christian habló con un medio roquenseoca y respecto a Mellado, había expresado lo siguiente:

«Conozco a mi rival. Cuando apenas comenzaba mi carrera, creo que llevaba alrededor de 12 peleas como amateur, tenía más peleas que meses de entrenamiento, en ese momento me tocó pelear con Mellado, en Valdivia. Él tenía bastante experiencia y muchas peleas como amateur, y aquella vez me tocó perder por puntos. Me hicieron debutar muy pronto y cada pelea que había la agarrábamos porque veníamos bien». 

Asimismo, con una gran convicción, afirmaba que: «Las revanchas están hechas para ganarse, así que vamos por eso».