Las enfermedades respiratorias a esta altura del año es algo usual, sin embargo, la preocupación no deja de ser un hecho. 

En Roca, una de los dos hospitales de la provincia con Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica, se trabaja con pacientes de distintas latitudes de Río Negro. La semana que pasó el trabajo se intensificó. El miércoles la ocupación llegó a casi el 80%, para el viernes ya había descendido al 55%.

El Francisco López Lima posee 20 camas para internación en pediatría y 6 en la UTI pediátrica. El viernes, en pediatría había 10 pacientes, 5 casos eran respiratorios (Bronquiolitis) y 2 asociaban también neumonía, todos asistidos con oxígeno. Uno de los casos es una niña que fue derivada el martes desde Sierra Grande.

Por otro lado, en la UTI, había 4 pacientes, 3 de ellos respiratorios. Dos de los internados son de Cipolletti, uno de Villa Regina y otro de Roca.

A Roca llegan pacientes de toda la provincia, mientras que Bariloche se encarga de la zona andina. La semana pasada, por ejemplo, llegaron desde Choele Choel y San Antonio Oeste. El caso de Sierra Grande, sin ir más lejos, demandó un traslado en ambulancia de siete horas, que incluía un médico, enfermera y chofer, y que además debía volver, otras siete horas de viaje.

La jefa del área, Flavia Farchi explicó que esto “No es algo nuevo, todos los años tenemos en invierno la epidemia de bronquiolitis” y que “En nuestra zona, los picos de casos suelen darse 3 o 4 semanas después de lo cuándo se da en ciudades grandes o en Buenos Aires”.

“En esta época del año crece mucho la demanda de consulta externa por patologías respiratorias: bronquiolitis, catarros, gripes” contó en diálogo con Dar La Nota en radio.

La bronquiolitis es una patología específica de los niños de 2 años, es de origen viral y afecta sobre todo a menores de 6 meses, ya que ellos no tienen aún la capacidad de defensa inmunológica, se la define como la primera infección viral de la vía respiratoria baja.

Los síntomas se traducen en la dificultad para respirar que se puede identificar con el aumento de la frecuencia respiratoria (cantidad de veces que el niño respira por minuto), aumento de uso de músculos para respirar (ver como se hunden las costillas o la panza al respirar), algunos silbidos o quejidos al respirar y fiebre, que no es alta, pero aparece los primeros días como también la tos, catarro, mocos o secreción de la nariz.

Es importante prevenir lavándose las manos, que los bebes se alimenten con la teta, que se cumpla con los esquemas de vacunación, mantener las casas aireadas y ventiladas (en horarios donde no haga tanto frio) para que se eliminen los gérmenes; si un mayor está con algún síntoma que utilice barbijo y no esté tan cerca del bebé, ambiente libre de humo ya que irrita la vía aérea.