Iván llegó a la Argentina en el año 2014, cuando, junto con un amigo, decidió cruzar la frontera para comenzar el Profesorado en Geografía en la capital neuquina. En aquel entonces, fueron acogidos por una mujer en su hogar, donde estuvieron unos cinco meses.

Tras vivir casi 8 años en Neuquén, decidió trasladarse a Roca, donde se aloja en Chacra Monte en la casa de sus tíos. Sin embargo, dejar sus estudios nunca fue una opción, por lo que optó por comenzar a recorrer 43 kilómetros (cerca de 90 ida y vuelta) para terminar la carrera en la Universidad Nacional del Comahue de Neuquén, un viaje que emprende mínimo dos veces a la semana.

Siempre con casco, luces o reflectantes y jamás con auriculares puestos, el joven de 30 años empieza su aventura por Ruta Chica o Calle 11, hasta llegar a la colectora de Ruta 22 que lo lleva directo a la ciudad de Neuquén. Luego de una larga pedaleada de casi dos horas, arriba al gimnasio “El Escondido” de la sede de la Universidad, donde se ducha y se prepara para cursar.

“Si hubiera una ciclovía que unirá Neuquén con Roca mucha más gente se animaría a hacerlo” se lamenta Iván, y explicó que “los ciclistas somos sujetos excluidos de las obras, estamos relegados de las políticas”. 

Pero el tiempo trae recompensas y todos sus esfuerzos denodados dieron sus frutos ya que, al día de hoy, lleva un avance del 74% de la carrera.

Recorrer 90 kilómetros no es un grán desafío para el joven chileno, ya que no es la máxima distancia que realizó pedaleando en un día. A principios de este año, cuando volvió la presencialidad, Iván vino desde su pueblo de origen en la localidad de Puñaco (Región de los Ríos, Chile) hasta Roca, en una travesía que le demandó nada más y nada menos que 500 kms y un lapso de una semana. Ahora, planea irse de nuevo a Chile en bicicleta a pasar las vacaciones de julio con su familia.

Planea recibirse el año que viene y anhela irse a vivir a la cordillera, puntualmente a San Martín o Junín de los Andes, para “poder elaborar algunos proyectos educativos que tengan que ver con la geografía y la bicicletas”, expresó.

Iván está convencido de que la bicicleta es un medio de transporte ideal, pero poco valorado. Sobre el final, explicó por qué elige esta forma de movilidad por sobre las demás: “la bicicleta se tiene solo como un medio de transporte, no como algo bueno para la salud. Y sirve por ejemplo para contrarrestar la ansiedad y la depresión”.