El gobierno de Javier Milei ha decretado la «emergencia en materia ferroviaria» luego del devastador accidente que tuvo lugar en Palermo la semana pasada. La medida, anunciada por el vocero presidencial Manuel Adorni, llega después de que la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) revelara una deuda de más de 100 millones de dólares y una red ferroviaria en estado crítico.

Durante una conferencia de prensa realizada en la Casa Rosada, Adorni enfatizó que la decisión no está directamente relacionada con el trágico choque de trenes, sino más bien con los hallazgos de la CNRT. Sin embargo, no se hizo mención a los significativos recortes de fondos que el gobierno ha impuesto a la Administración de Infraestructura Ferroviaria, la cual ha sufrido una reducción del 92% en su presupuesto.

En lo que va del año, las transferencias de fondos del Tesoro hacia las empresas ferroviarias han sido recortadas en un 60%, afectando gravemente las tareas de mantenimiento del sistema. Esto ha llevado a un empeoramiento notable de la red ferroviaria, que la CNRT describe como «absolutamente devastada».

Si bien el gobierno reconoce que hubo un error humano en el accidente, se ha mostrado respetuoso con el trabajo de la Justicia para determinar las responsabilidades. Sin embargo, la falta de inversión y el alarmante deterioro de la infraestructura ferroviaria no pueden pasar desapercibidos.