Hace semanas que distintas agrupaciones y vecinos de la ciudad comenzaron a realizar diversas actividades culturales como símbolo de resistencia ante el desalojo del espacio realizado por el Ejecutivo local, que pretende emplazar las oficinas de Turismo municipal.

“Hace días nos enteramos que el Municipio de General genocida Roca, a cargo de María Emilia Soria, radicó la denuncia por usurpación en la justicia provincial, criminalizando a quienes venimos luchando por sostener el espacio”, detallaron mediante un comunicado.

Además, expresaron que “los usurpadores son ellos, avanzando con violencia en la desarticulación de un espacio cultural y educativo de participación comunitaria que funciona de manera autónoma e independiente desde hace años”.

En este sentido, realizaron una denuncia pública del secuestro de todo el material perteneciente a las comunidades y colectivos que hicieron uso de la biblioteca todos estos años. Según detallaron, desde la Comuna local incautaron libros, juguetes, obras artísticas y producciones contraculturales, sumado a materiales e insumos de trabajo. “Antes quemaban libros, ahora los secuestran”, aseveran

“En paralelo a esto, el municipio cerró absolutamente cualquier instancia de diálogo, desconociendo el aspecto político del conflicto y limitando su resolución al ámbito penal. Nos preguntamos cuál será el rol de los organismos que se habían propuesto como veedores y garantes en la mesa de diálogo ante el avance de la criminalización y con el conflicto ya en ámbito penal”, continuaron.

“Sostenemos que la justicia no tiene porque intervenir en conflictos que son exclusiva y profundamente políticos. Sabemos que la figura penal típica para la criminalización de conflictos es la usurpación y que la única salida para el sistema penal es la represión”, concluyeron.

En este marco, convocan a toda la comunidad a seguir participando de las actividades artísticas y culturales abiertas de la biblioteca.