En un nuevo Día de la Memoria, miles de personas se congregaron en Plaza de Mayo en una marcha sin precedentes, mostrando su rechazo a un Gobierno que niega la historia y en medio de constantes provocaciones. Organismos de derechos humanos, organizaciones políticas, sociales, estudiantiles y sindicales, junto con personas de a pie, se unieron en una muestra de unidad en la lucha por los derechos humanos.

A pesar de los intentos por realizar una marcha unificada, los organismos de derechos humanos decidieron realizar actos separados en horarios acordados. Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y H.I.J.O.S de la regional capital se unieron bajo la consigna «30 mil razones para defender la patria. Nunca más miseria planificada».

La convocatoria, respaldada por 13 organismos de derechos humanos y las tres centrales obreras, fue anunciada en una conferencia de prensa encabezada por destacados líderes sindicales y defensores de los derechos humanos.

 

 

El secretario General de la CGT, Héctor Daer, los dirigentes de las dos CTA, Hugo Yasky y Hugo “Cachorro” Godoy, y figuras emblemáticas como Estela de Carlotto, Taty Almeida y Adolfo Pérez Esquivel se unieron en el llamado a la unidad en la defensa de los valores de la democracia y los derechos humanos.

 

En este contexto político, económico y social crítico, resulta destacable la participación de una columna que reúne a varios sectores de la Unión Cívica Radical (UCR), marcando un hito en la historia del partido. Esta muestra de unidad demuestra la necesidad de dejar de lado las diferencias y trabajar conjuntamente en pos de un país más justo y respetuoso de los derechos humanos.