La disputa por territorio de las bandas narcos se define con balaceras desde motos. El modus operandi está instalado desde hace tiempo y de esta manera le hacen saber al infiltrado que está molestando a algún poderoso, a quien desde hace tiempo le pertenece la zona donde desarrolla la venta de droga. De esta forma fue que un menor resultó herido en sus piernas, mientras que una decena de proyectiles impactaron en el frente de su vivienda.

El hecho sucedió el sábado cerca de las 18.30 en pleno corazón de barrio Nuevo de Roca, en la Avenida San Juan y Picaflor, en la zona norte de la ciudad donde la guerra narco tuvo una estampida con la detención de Milton Prado, considerado el capo de la venta de cocaína. Aunque el líder intentó mantener su negocio desde la cárcel, fue descubierto y enviado a Senillosa, por lo que sus soldaditos quedaron desempleados y la guerra se planteó con otros grupos como los Salteños, de un crecimiento importante en los últimos meses, a quienes se les atribuye la construcción de sótanos para procesar, estirar y distribuir la droga.

De acuerdo a los datos conocidos, el joven herido alcanzó a ver como dos sujetos se acercaban a su vivienda, luego de pasar varias veces por la calle. En una de esas pasadas, una persona que iba de acompañante en una moto levantó su mano y desenfundó un arma de fuego y comenzó con los disparos. La víctima se encontraba en el patio de la casa y fue alcanzado por un proyectil que le produjo una herida en una de sus piernas.

En minutos llegó al lugar un móvil de la Comisaría 21° que se hizo cargo de la situación. También se convocó a una ambulancia del hospital Francisco López Lima, que trasladó al herido para realizarle diversos estudios. Se supo que las heridas no revestían mayor gravedad y luego de algunas curaciones fue dado de alta.