Así quedó definido el pasado viernes 27, tras la última audiencia de mediación realizada entre los administradores del Cine Rex y los propietarios del edificio en el cual funciona ese espacio cultural.

Todo comenzó ante la dificultad de los dueños del cine de afrontar los compromisos económicos asumidos con los locadores. Sin embargo, de acuerdo a lo informado por Alina Iturbe, concesionaria del Rex, habían llegado a un acuerdo para poder asumir los pagos.

No obstante, y según trascendió en las últimas horas, en el año 2021 los inquilinos ya habían firmado un «convenio de desalojo» que vencía en el año 2022. Luego de cumplido ese lapso, los propietarios del local otorgaron un nuevo plazo de tres meses para desalojar las instalaciones, que vence en el mes de agosto. Por lo que, como indicaron los dueños del cine, el problema no sería el valor del alquiler sino que el acuerdo implica entregar las instalaciones, y no es posible ninguna extensión en el contrato de alquiler.

De esa manera, es inminente el cierre y las autoridades del Cine Rex tienen tres meses para conseguir un nuevo salón.

Mientras tanto, los vecinos y vecinas de Roca aprovechan al máximo las instalaciones y disfrutan de las mejores películas, al tiempo que “cruzan los dedos” para que la pantalla grande encuentre un nuevo lugar en la ciudad.