Finalmente se confirmó que el cuerpo hallado en la zona rural al norte de Roca pertenece al empleado judicial Javier Videla, secuestrado y desaparecido el 4 de marzo pasado. La información surgió tras los primeros análisis forenses al que fue sometido en la morgue judicial. Se supo que la familia ya fue comunicada de la noticia.

Aunque el cuerpo estaba en un absoluto estado de descomposición y hasta le faltaba una de sus extremidades, producto del accionar de algún animal, los forenses pudieron determinar la identidad del cuerpo. Por la ropa que llevaba colocada y algunos estudios más al que fue sometido que le permitieron recuperar las huellas dactilares, le comunicaron al fiscal Luciano Garrido que el cuerpo pertenecía a Videla, a quien se lo buscó intensamente por la zona norte de Roca durante varios meses posterior a su desaparición.

El cuerpo en un principio estuvo escondido debajo de unos arbustos y con el tiempo fue corrido de ese lugar por algunos animales. El empleado municipal que logró hallarlo, se dio cuenta por la presencia de aves carroñeras

El fiscal Garrido, en su último día como integrante del Ministerio Público (mañana asume como Juez), logró descubrir casi sin querer  qué pasó con Videla, empleado de la Cámara Cívil de la Ciudad Judicial de Roca. Y explicó que en la autopsia desarrollada ayer, los forenses lograron extraer del cuerpo un proyectil de pistola 9 milímetros, que sería de iguales características a los empleados por el único detenido Antonio Colicheo, para matar a Alejandra Camusz e iguales a los que quedaron en la puerta del departamento de Videla, en aquella noche del 4 de marzo cuando fue llevado por la fuerza en su propio vehículo, un Chevrolet Vectra.

«El cuerpo en un principio estuvo escondido debajo de unos arbustos y con el tiempo fue corrido de ese lugar por algunos animales. El empleado municipal que logró hallarlo, se dio cuenta por la presencia de aves carroñeras», contó Garrido en rueda de prensa durante la mañana de hoy, al mismo tiempo informó que el lugar donde fue encontrado es a la altura del kilómetro 63 de la ruta provincial 6. El mismo funcionario confirmó que «por la cantidad de fluidos que había en el lugar entendemos ha sido el deposito permanente del cuerpo».

La familia fue notificada por el fiscal y esperarán que finalice la autopsia para poder hacer entrega del cuerpo.

De los operativos de búsqueda, en los que participó el propio jefe de Policía Osvaldo Tellería, se supo que desde Roca hasta el campo La Perseverancia (donde fue detenido Colicheo horas después del hecho a unos 90 kilómetros al norte de Roca cerca de casa de Piedra) «el área fue peinada, pero no con tanta profundidad», explicó el fiscal Garrido.

Videla fue secuestrado por un hombre a quien le había dado su auto para que se lo arregle. Precisamente el vehículo fue encontrado a la vuelta de la casa donde desapareció con muchas manchas de sangre en su interior, que luego se comprobó que pertenecían al empleado judicial. En otro auto, de la hermana del hombre desaparecido, el que debía arreglar este mecánico, fue encontrado Antonio Colicheo en un campo a unos 90 kilómetros al norte de Roca, con varias pertenencias de Videla.

En el mismo campo se encontró el cuerpo de una mujer, Claudia Alejandra Casmuz, quien estaba semienterrada y se comprobó que la pistola 9 milímetros con la que la mataron, era la misma que tenía Colicheo en su poder y con la que  disparado dentro del Chevrolet Vectra propiedad de Videla, en el que fue secuestrado.

La zona norte de Roca fue rastrillada durante varias semanas por personal policial y también colaboraron compañeros de trabajo de Videla, sin embargo no se halló ningún rastro que pudiera orientar la búsqueda hacia algún sector en particular.