Deportivo Roca Integrado se encuentra ante un nuevo desafío. El equipo de fútbol está participando del torneo Honor y Gloria en homenaje por el 40° aniversario de la Guerra de Malvinas.

El certamen de fútbol 11 cuenta con jugadores que tienen distintos grados de discapacidad. Es organizado por el Depo Integrado y tiene la participación de 12 representativos de distintos puntos de la provincia y también de Neuquén.

Los equipos que juegan el certamen son de San Antonio Oeste, Lamarque, Luis Beltrán, Mainqué, Bariloche, El Bolsón, Jacobacci y de Neuquén lo hacen NeuDe Día y San Martín de los Andes.

La competencia se desarrolla durante todo el año con una fecha por mes o bimensual, según explicaron los organizadores. La primera jornada se disputó el sábado en San Antonio Oeste.

Además, tienen el aval de la Federación Argentina de Deportes para Personas con Discapacidad Intelectual (FADDIN) y Racing Club Integrado (Avellaneda).

La delegación del Naranja cuenta con 30 integrantes, tiene como responsables a Oscar Del Castillo y Marcelo Fernández, acompañados por Brenda Rivas y un grupo de padres.

“La idea del certamen es que todos los chicos tengan la posibilidad de jugar. Es fútbol once pero vamos a ir rotando la formación para que todos puedan participar de la competencia”, contó Chango Del Castillo en la previa del debut.

En el inicio Deportivo Roca se enfrentó con Águilas del Sur de Beltrán y le ganó por 3-1 en el encuentro jugado en el Club Náutico de San Antonio. El acto de inauguración se llevó a cabo el sábado por la mañana y tuvo la presencia de los veteranos de Malvinas de la zona junto a todas las delegaciones participantes.

Luego del homenaje a los caídos en el conflicto de Malvinas llegó el turno de los partidos.

“El objetivo es poder integrarnos todas las instituciones en estos encuentros que vamos a llevar adelante una vez por mes. La segunda fecha ya está programada para mayo en Lamarque”, aseguró Del Castillo.

Este año el Depo Integrado sumó nuevos integrantes. La vuelta a las actividades después de la pandemia despertó el interés y permitió ampliar el número de participantes. “Estamos trabajando con escaso apoyo externo, pero tenemos el aval y acompañamiento del club en todo lo que hacemos. Para este viaje tuvimos que juntar los fondos haciendo rifas y otras actividades”, destacó el referente.

La realidad golpea y es difícil de afrontar. “Los chicos con discapacidad y los veteranos de guerra son los más olvidados. Por eso surgió la idea de integrarnos en estos encuentros para tener visibilidad. Estamos trabajando para formar una asociación patagónica y tener mayor respaldo institucional”, concluyó.