Insólita y apasionante definición de la Supercopa Argentina que proclamó a River como nuevo campeón del fútbol argentino al vencer en la final a Estudiantes de La Plata por 2 a 1 en un duelo que no comenzó para nada bien pero terminó con una sonrisa para el pueblo Millonario.

Es que antes de llegar a los tres minutos del primer tiempo, el “Pincha” se puso en ventaja con un formidable cabezazo de Javier Correa, que guapeó y ganó entre los centrales pata batir a Armani luego de un exquisito centro de Cetré, uno de los puntos altos de la noche cordobesa.

Estudiantes salió decidido a amargarle la noche al elenco de Martín Demichelis, que luego de estar en la mira, por no ganarse pese a los buenos resultados, el corazón del hincha de River. Pero el entrenador supo como corregir las ideas y encaminar un partido donde tuvo que tener demasiada paciencia para sostener la intensidad.

Es que sobre el final, todo parecía indicar que sería el conjunto platense quien alzaría el título, pero a falta de diez minutos para el cierre, Solari combinó una serie de pases con Santiago Simón, y cuando intentó enviar un centro hacia atrás en busca de alguna pierna de un compañero, tuvo la fortuna de que la pelota se desvió en Zaid Romero y dejó sin respuesta a Matías Mansilla para estampar la igualdad.

Corría el primero de los cinco minutos que adicionó Yael Falcón Pérez cuando Rodrigo Aliendro sacó un misil desde afuera del área y colgarla del ángulo izquierdo de Mansilla y desatar la euforia de River que se quedó con el tercer título de la era Demichelis en un final a puro corazón.