Hubo cadena de oraciones para pedir por un milagro. La vida del piloto Alberto Castillo recorrió el filo de la cornisa luego del vuelco en Luis Beltrán durante el desarrollo del Rally del Sur. Cuando fue internado en General Roca, los médicos advirtieron a la familia que tenían que estar preparados para recibir la peor noticia.

Los días pasaron y la recuperación fue milagrosa. «Nací de nuevo. Sé que estuve más cerca de San Pedro que acá en la tierra», dijo en Canal 10 y aseguró confiado que no tiene pensado abandonar el rally.

Beto agradeció a la gente del Valle Medio que estuvo cerca durante su internación. Mencionó especialmente a la policía que le salvó la vida, Cynthia Labrada. Ella logró reanimarlo cuando no tenía signos vitales. «Comencé a hacerle RCP pero no volvía. Y no volvía…Al ratito me empecé a encomendar a Dios y a Ceferino, de quién soy devota», contó. 

Beto repasó la escena y reflexionó: «Si Sofía se desmayaba, moríamos ahogados». 

El recuerdo del piloto tiene algunas piezas, no todas. «Me acuerdo cuando dimos la primera vuelta, promediábamos los 170 kilómetros. Para mí se rompió algo de la dirección porque no lo pude dominar el auto. Atinaba a defenderlo pero no obedecía y chocamos con un talud. Después no recuerdo nada hasta el momento en el que me llevan a Roca». 

Más allá del inmenso susto, Beto dijo que va a seguir corriendo. Van a bajar la categoría «porque es mucha velocidad y tenes muchos riesgos».