La inestabilidad y la incertidumbre que existe en el mercado ha perturbado todas las relaciones económicas. Si hace un año para acceder a un vehículo económico, necesitabas 30 sueldos completos; hoy se deben disponer de 44 sueldos. Una diferencia que se explica por la caída del poder adquisitivo de los sueldos pero también por las variaciones del dólar y la menor disponibilidad de importaciones.

Este cambio en la realidad del argentino promedio representó también una modificación en el escenario: en esta retracción generalizada, los autos de menor precio empiezan a tener menos salida que los de gama alta. Solo porque existe un sector de la población al que la crisis no parece afectarle. Incluso pagando en dólares y al contado.

Pero esa no es la realidad de un trabajador de la región. En Roca, calculando un promedio de sueldos en la actividad privada, se pudo establecer una media de 70.000 pesos mensuales. El Fiat Cronos, puesto en la ciudad con transporte incluido, tiene un valor de 3,1 millones de pesos. Por consiguiente, quien quiera acceder al mismo deberá invertir el equivalente a 44 meses de su esfuerzo. Claro que según el gerente de Piré Rayén, un vehículo de este tipo viene equipado con sensores traseros, airbags, control de estabilidad, cierre centralizado y llantas de aleación, entre otros elementos de confort y seguridad. Bastante superiores a los vehículos de la misma ama que se fabricaban hace 15 años.

En caso de necesitar la financiación, igual va a tener que disponer de una suma cercana al 60 % del total: 1,8 millones para poner contante y sonante en mostrador (o hacer una transferencia). El resto a financiar va a depender de los planes que pueda disponer la fábrica (en el caso de Fiat, 24 cuotas con 24 % anual); o bancaria (y aquí se habla de entre el 50 y el 60 % anual).

A estos valores hay que agregarle el costo de patentamiento: en Río Negro es de 110.000 pesos, por lo que habrá que sumarle otro mes y medio de trabajo.

En comparación: ese sueldo promedio del sector privado rionegrino, hace 12 meses era de 45.500 pesos. Ese mismo Fiat Cronos tenía un valor de 1,4 millones de pesos. Por lo cual, representaba “apenas” 30 meses íntegros de trabajo. El sueño se alejó 14 meses.

En otras marcas el panorama es más o menos similar. Un Ónix, el vehículo de “piso” de GM, tiene un valor base de 3.076.000 pesos, casi el mismo valor que el Cronos. Pero con un pequeño detalle: no se están consiguiendo en la versión 2022. Se puede apostar por una versión 2021 patentado, por un pecio levemente inferior (2,9 millones de pesos).

“Sigue siendo un 0Km, pero es la versión del año anterior”, aclara un vendedor. El que sí está llegando es el Ónix deportivo, con algunas prestaciones superiores pero a un costo mayor: 4,2 millones de pesos, casi un 30 % más. Los problemas de financiación son equivalentes en las mayorías de las marcas: la tasa bancaria por encima del 50 % con cuotas que pueden llegar a 60.000 pesos.

Hay otra realidad: el mercado rionegrino luce desvaído frente al neuquino. Las concesionarias que tienen sucursales en General Roca, Bariloche y Neuquén explican que la relación es de 70/30 entre un lado y otro de la frontera. Algunos se lo atribuyen al impacto de la zona petrolera y de la mayor renta per cápita que existe en Neuquén. Pero también está el factor “competencia”: la capital neuquina está muy cerca de todas las ciudades del Alto Valle y ofrece una amplia variedad de marcas en un sector de muy fácil acceso.