Este fin de semana, el sábado 2 y domingo 3 de noviembre, el nuevo Predio Ferial Municipal de General Roca será el escenario de un evento imperdible que combinará música en vivo, gastronomía y la destacada presencia del artista Valentino Merlo.

Los asistentes tendrán la oportunidad de probar la sidra tirada y un nuevo producto especial de la Bodega Krusha, un emprendimiento familiar de la ciudad, ubicada en el Alto Valle de Río Negro, Patagonia, Argentina.

Krusha se distingue por su espumante de pera artesanal, elaborado con frutas de la región. “Lo hacemos porque amamos la alquimia de elaborar algo distinto y único. Nuestra propuesta de valor es diferenciarnos como un producto regional, artesanal y organolépticamente distinto; esto se logra mediante distintos tipos de peras de la región, que se utilizan para la fermentación, bajo el método Champenoise”, explica María Florencia, titular del establecimiento.

El equipo de Krusha está conformado por su madre, Adriana Luccioni, encargada del control y análisis físico-químico del espumante; su padre, Víctor Calderón, responsable del área de producción; y ella misma, que se ocupa de la administración. “Mis padres tienen una vasta experiencia en el medio: mi papá lleva 20 años y mi mamá 40 en una sidrera de la zona, mientras que yo trabajé en varias bodegas de vino muy importantes”, añade María.

El proceso de elaboración del espumante incluye una molienda tradicional, con variedades como Williams, Packham’s y Beurre Bosc. La primera fermentación dura entre cinco a ocho días a una temperatura ambiente de 22°C a 24°C. Luego, se realiza el descube y trasiego del caldo, que se limpia de borras. En un nuevo tanque, se coloca el licor de tiraje y se llenan las botellas para iniciar la segunda fermentación en botella, un proceso que incluye aproximadamente 60 días en pupitres, donde se gira la botella diariamente para desprender las borras del vidrio.

Finalizado este proceso, se realiza el degüello: el cuello de las botellas se sumerge en una solución frigorífica que congela el depósito de sedimentos. Después, se expulsa el tapón provisional, las borras y una pequeña parte del líquido. A continuación, se agrega un “licor de expedición” compuesto por azúcar y caldo de pera, ajustando las proporciones para obtener dos variedades: dulce o natural. Finalmente, se coloca el corcho definitivo, asegurado con un bozal de alambre.

Desde el emprendimienton invitaron a toda la comunidad a sumarse y a conocer todas sus variedad, «VenÍ a degustar y celebrar con nosotros», concluteron. No te pierdas esta oportunidad de disfrutar de la música, la buena comida y las exquisitas sidras y espumantes de Krusha.