El reality show Gran Hermano ha sido testigo de otra pelea explosiva en las últimas horas, esta vez protagonizada por Juliana «Furia» Scaglione y su novio en el juego, Mauro Dallessio. La pareja, que se había formado recientemente dentro de la casa, tuvo un enfrentamiento lleno de emociones y tensiones.

El conflicto se desencadenó después de que Mauro tuviera un altercado con Catalina Gorostidi, otra concursante del programa, lo que hizo que Furia sintiera que su novio ya no confiaba en ella. La médica, amiga de Furia, también se involucró en la pelea, expresando su descontento con Mauro y su forma de jugar.

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El cruce entre los participantes fue tan intenso que Mauro terminó llorando en su habitación, mientras Furia y Paloma intentaban consolarlo. En medio de las lágrimas, Mauro le pidió a Furia que se acostara con él, pero ella se mantuvo firme en su decisión de que ambos debían aprender a estar por separado en la casa.

El nuevo participante admitió que todavía tiene mucho que aprender sobre sí mismo y que este proceso de convivencia en la casa lo ha llevado a confrontar emociones y sensaciones que tenía guardadas. Furia estuvo de acuerdo e hizo hincapié en que Gran Hermano es una experiencia de aprendizaje.

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Sin embargo, la discusión rápidamente cambió de tono cuando Mauro mencionó sentirse malentendido. Furia reaccionó con furia, sintiéndose acusada injustamente. La situación se volvió tan tensa que Furia decidió retirarse de la discusión, pero no sin resaltar las palabras que, aparentemente, Mauro le había dicho.

MAURO: «Es un teléfono descompuesto, ya no sabés a quién le decis algo…»

FURIA: «Ah bueno me voy a la mierda. Soltame, soltame pelotud0 del ort0»#GranHermano pic.twitter.com/X9yh0luOxj

— TRONK (@TronkOficial) March 17, 2024

La intervención de Paloma reveló que Mauro había compartido con otras personas lo que supuestamente Furia había dicho. Esto exacerbó la ira de Furia, quien no pudo evitar expresar su enojo mientras se iba.

La pelea entre Furia y Mauro ha dejado a todos los participantes de Gran Hermano sorprendidos y ha generado un clima de tensión en la casa. El futuro de la relación entre la pareja es incierto, ya que el conflicto continúa latente y la convivencia se vuelve cada vez más difícil.