La Orquesta ocasional de Rock Sinfónico se preparaba para la presentación por los 50 años de la Casa de la Cultura de Roca, el ensayo terminó cerca de las 22 y los músicos fueron abandonando la escuela donde realizaban la práctica. Uno de los concertistas cargó su incómodo contrabajo, lo cargó en su auto y volvió al salón para seguir juntando sus cosas. Pero cuando regresó al vehículo, alguien lo había abierto y se llevó el instrumento sin que nadie vea nada.

La noticia se difundió rápidamente vía redes sociales, con la esperanza de que alguien pueda aportar datos. Es que no es un instrumento fácil de transportar por su tamaño y su peso, sin embargo no aparecieron testigos de lo sucedido.

El hecho sucedió cerca de las 22 del viernes, afuera de la Escuela Primaria N°238, en inmediaciones del paseo del Canal Grande en Roca, en Santra Cruz y Gelonch. Si bien muchos integrantes de la orquesta salieron rápidamente y comenzaron a recorrer la zona, no vieron ningún movimiento sospechoso.

El instrumento, además del alto valor económico que tiene, está hecho especialmente para el músico que lo utilizaba, ya que es zurdo no hay en el mercado este tipo de contrabajos, por lo que debe ser fabricado. «Es mi herramienta de laburo, y por más que quisieran no lo puede usar otra persona. Tiene doce años conmigo, se le nota el paso del tiempo», confió Martín al medio local Dar La Nota.

El propio músico describió que el instrumento tiene algunas características muy particulares que lo hacen único, tiene un arreglo en la parte del mástil y es de color marrón oscuro.