El Ministerio Público Fiscal (MPF) imputó a un hombre de 35 años el delito de “grooming” tras haberse recepcionado una denuncia del padre de la adolescente que habría recibido mensajes de su profesor de danza. El grooming es el acoso de un adulto hacia un menor. El victimario pone en contacto con un niño, niña o adolescente con el fin de ganarse poco a poco su confianza para luego involucrarle en una actividad sexual.

En la audiencia de formulación de cargos realizada en Roca, el equipo fiscal enumeró la prueba con la que contaba para esta instancia. La identidad del imputado no se brinda en cumplimiento de las leyes de protección de menores, ya que en comunidades pequeñas, si se identifica al acusado es posible individualizar y revictimizar a quienes sufrieron el acoso.

«Los mensajes enviados por el imputado habrían tenido claras propuestas de índole sexual, con el objetivo de cometer un delito contra la integridad sexual de la menor de edad. Además el hombre habría insistido en que la chica no contara, en varias oportunidades le habría consultado si guardaba secretos», dijo el fiscal del caso.

 

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La evidencia fue completada con la medida de prohibición de acercamiento que el imputado ya cumple y que fue emanada desde el Juzgado de Paz, luego de que el progenitor expusiera la situación.

 

En el contexto de la investigación se hizo un allanamiento donde se secuestraron dos teléfonos celulares, “uno de ellos era el del imputado y fue peritado por la Oficina de Investigación en Telecomunicaciones (OiTel), el análisis realizado por los especialistas fue concluyente para imputar el delito que nos convoca”, dijo el representante fiscal.

 

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El hombre fue asistido en la audiencia por un abogado de su confianza, que solicitó que no se tuvieran por formulados los cargos.

Por su parte, la jueza de Garantías interviniente, resolvió que fuera imputado por el delito de “grooming”, según el Artículo 131 del Código Penal.