La ciudad fue escenario de un nuevo hecho delictivo en el que, si bien no pudo concretarse el robo, si se vivió una situación verdaderamente violenta y repudiable. 

Todo comenzó cerca de las 23 con un llamado a las autoridades que alertaba por la presencia de un sujeto que estaba fuera de sí en una vivienda de Barrio Nuevo. 

Inmediatamente, se dirigió al lugar un móvil policial, que a pocas cuadras de llegar a su destino, es interceptado por una vecina quien les asegura que alguien había intentado robarle su moto. Ante esta sorpresiva situación, los oficiales le explicaron que debía acercarse a la comisaría a realizar la denuncia correspondiente y continuaron hacia la casa que había solicitado su presencia. 

Cuando llegaron, se encontraron con que el sujeto que había intentado robar la moto unas cuadras antes, era el mismo que se encontraba en esta casa en un estado de agresividad total. Incluso, esta vivienda pertenece a su familia, quienes, previamente, le pusieron una prohibición de acercamiento por reiterados conflictos del pasado. 

Luego de enterarse de todas estas cosas, los policías se dispusieron a ingresar a la propiedad, con la autorización de la propietaria, para reducir al joven. Pero cuando lograron entrar, se encontraron con que el muchacho portaba una caño con el cual amenazaba e intentaba golpear a los oficiales. 

Transcurridos algunos minutos, finalmente pudieron detener al violento y quitarle el objeto. Finalmente fue trasladado a la comisaría 21 de la ciudad.