El lunes pasado, jefes y jefas de distintas áreas del Hospital Francisco López Lima elevaron una nota solicitando que se declare la emergencia sanitaria ante la situación que padece el nosocomio roquense.

Esta situación, de larga data, es parte de la herencia que recibió el Gobierno actual tras la mala gestión en materia de salud y también en seguridad y educación por parte de la ex gobernadora Arabela Carreras, sumado a otra mala administración de recursos del Ministerio de Salud de Nación durante la presidencia de Alberto Fernández.

El panorama que persiste y es muy difícil de sortear aún, ante una crisis económica que termina siendo el resultado de los dos primeros meses del gobierno de Javier Milei, deja a roquenses y un gran porcentaje de la población rionegrina en una situación muy vulnerable.

Cabe recordar que el hospital de Roca es de complejidad 6 y es receptor de derivaciones de gran parte de la provincia, desde Choele Choel a Catriel, incluyendo una gran extensión de la Línea Sur.

La nota enviada al vicegobernador Pedro Pesatti, con copia a la ministra de Salud Ana Senesi y a la directora Mariana Aravena, fue firmada por diez jefes y jefas de distintas áreas. 

La misma señala que tiene el «objeto de instrumentar los medios necesarios para sanear la situación sanitaria que atraviesa» el nosocomio y agrega que «desde hace meses presenta una falta de medicamentos e insumos de soporte vital básico que hacen imposible sostener la vida y la calidad de atención de los pacientes».

Ante esto, exigen que se declare la «emergencia sanitaria» en el término de 48 horas, que se cumplen hoy miércoles, caso contrario, recurrirán a la justicia.

El Gobierno Provincial realizó una fuerte compra de medicamentos y pagó deudas

Ayer, el Gobierno de Río Negro informó que con «un enorme esfuerzo económico, se logró normalizar el sistema de salud, saldando miles de millones de la deuda recibida en un contexto financiero muy complejo».

Mediante una inversión de más de 21.000 millones de pesos, se adquirieron medicamentos, insumos médicos y se liquidaron deudas pendientes, todo ello gestionado por el Ministerio de Salud con el objetivo de normalizar el funcionamiento y elevar el estándar de los servicios hospitalarios en la región.

Se priorizó la compra de una amplia gama de medicamentos esenciales, incluyendo medicación Fibroquística; medicamentos oncológicos, medicación para crónicos, medicamentos de altos costos, descartables, insulinas, reactivos para toxoplasmosis y para diagnóstico de Chagas, soportes nutricionales, elementos de protección personal, leche deslactosada, fortificador de leche humana, entre tantos otros.