La Fundación GEN, de origen roquense, sigue creciendo y buscando consagrarse como un faro en la Patagonia de la producción de Cannabis Medicinal.

Este jueves se llevó a cabo una importante reunión en la que se dio a conocer el trabajo que realiza la fundación ante el Instituto Nacional de la Semilla (INASE), un paso vital para ganar visibilidad y lograr mayor impulso.

En la misma, desde Fundación Gen se informó que se está desarrollando una genética de cáñamo industrial adaptada a nuestra geografía pudiendo ser una de las primeras en el país y con la marca Patagonia.

«Sería un impacto muy grande y favorable para nuestras tierras» indicaron desde la fundación.

Además, en la oportunidad se aprovechó para hablar del trabajo y desarrollo del cultivo de cáñamo industrial y cannabis medicinal que se viene realizando en el Alto Valle.

Del encuentro a través de Zoom, participó Gabriel Gimemez, director de INASE, Martin Ancaten, director del Crear Alto Valle y el Secretario municipal de Producción del Municipio de Roca , Mario López. Entre otras cosas, se programó el recorrido de Gabriel Giménez por los cultivos habilitados por INASE en el Alto Valle.

Fundación Gen

Fundación Gen es una ONG conformada por un grupo interdisciplinario de productores/ras, profesionales y especialistas del Valle de Río Negro con experiencia y proyectos compartidos desde hace más de 10 años pero con personería juridica desde el año 2019.

Desde  hace años investigan las diferentes etapas del proceso productivo de la planta cannabis sativa y trabajan con metas claves:

• Adaptación de la planta a la zona climática y de suelo;
• Producción de semillas;
• Desarrollo de nuevas variedades;
• Elaboración de plantines;
• Cultivo Indoor, Greenhouses y Outdoor;
• Almacenamiento y secado; 
• Elaboración de fitopreparados;
• Desarrollo de productos industriales.

El proyecto se desarrollará como epicentro en el ejido Municipal de General Roca con la articulación de productores del Alto Valle de Rio Negro

Como objetivo general, se plantea crear un polo productivo de cannabis basado en prácticas agroecológicas, sustentables y amigables con el ambiente, que permita el desarrollo socio-económico del sector favoreciendo el reordenamiento territorial.

Y entre sus objetivos específicos, se busca acceder a territorios para cultivar,  estudiar, analizar y evaluar los diferentes aspectos técnicos de la planta, generar evidencia científica sólida para garantizar la calidad y trazabilidad de los productos a desarrollar y fortalecer el territorio en su proceso de transformación por el nuevo cultivo.

La zona de impacto está pensada en el Alto Valle de Rio Negro, desde Cipolleti a Chichinales.