El proceso electoral de la Universidad Nacional del Comahue terminó con la victoria del oficialismo. Un margen escaso de cuatro puntos porcentuales que le permitió revalidar su propuesta de la mano de la ex decana de Humanidades, Beatriz Gentile. La nueva rectora tendrá una tarea compleja por delante: asumir la universidad en su compleja estructura regional, posicionar a la universidad “frente al desafío del siglo XXI” y conseguir un presupuesto que permita llevar adelante las obras que necesita.

“Ahora viene el trabajo fuerte, poder darle forma en el trabajo a esta plataforma, a estos trazos gruesos que hicimos en la campaña. Poner a la UNCo a tono con el siglo XXI, pensar en los próximos 50 años”, enfatizó. Y dio algunas pistas del nuevo estilo: “es el momento de construir, de volver a convocar a todas y todos. La elección ya pasó y volvemos a caminar los pasillos de la universidad para encontrarnos y poner en marcha aquello que nos planteamos como proyecto”.

Convergencia Universitaria, el sector triunfador en los comicios, tomó nota rápidamente del panorama que enfrentaba. La escisión del sector que impulsó la candidatura de Andrés Ponce de León (ex titular de Derecho y Ciencias Sociales), mostraba el malestar con la gestión de Gustavo Crisafulli por la concentración de las decisiones en Neuquén. En “la Barda”, donde funciona el rectorado y se concentra un gran porcentaje de las unidades académicas. Por eso su primer paso fue convocar a Paul Osovnikar, director de Ciencias Marinas en San Antonio Oeste.

Y por allí pasó también el primer mensaje de Gentile: “trataremos de modificar la inercia de la universidad, la centralidad de la toma de decisiones en la Barda, y poder ejercer una práctica que permita un diálogo fuerte con las unidades académicas que están más alejadas”. Y en ese sentido resaltó el respaldo que obtuvo en “San Antonio, Viedma, Bariloche, Cinco Saltos, Lengua en Roca. Para nosotros es muy importante que ese mensaje que dimos, con “Polo” Osovnikar, tenía que ver con achicar las distancias. Es el desafío, es lo que pretendemos cambiar, trabajar mancomunadamente y más regionalmente. Y en ese sentido, somos optimistas para dar vuelta la página de esa situación en la Universidad”.

Gentile, doctora en Historia y ex delegada de Derechos Humanos en la región, precisó que la transición con la gestión de Crisafulli “será ordenada y planificada”, porque “ya veníamos trabajando en conjunto y hasta la asunción nos vamos a poner en sintonía con lo que queda pendiente”.

En cuanto a instalar a la Universidad en el siglo XXI, expresó que el objetivo “es volver a dar respuesta a las necesidades de la comunidad y de la sociedad”, con carreras técnicas y terciarias y el acceso a través de las distintas plataformas digitales.

“La educación pública es la marca de agua en la Argentina. Somos una sociedad que abraza la universidad, entendemos que es un derecho y no un privilegio, y vamos a insistir que nuestra querida universidad siga siendo una opción para todos y todas. Una opción que garantice esa oferta académica, que garantice inclusión abierta y diversa de todos nuestros estudiantes”, planteó.

Además, precisó que se buscará recuperar el espacio de los rectores de universidades patagónicas en el Consejo Interuniversitario Nacional. “Compartimos una característica común, que es la dispersión y la diversidad geográfica. Necesitamos que se nos reconozca esa situación”, enfatizó.

Resultados finales

Según los cómputos finales, el sector de Gentile se impuso con el 51,83 % de los sufragios ponderados; contra el 48,17 % que obtuvo Ponce de León. El oficialismo se impuso en los claustros de docentes y estudiantes; mientras que la oposición venció entre los graduados y los no docentes.