Según consta en la denuncia a la que accedió el medio un medio roquense Digital, la maestra roquense advirtió en marzo de 2016 faltantes en el saldo de su cuenta que no correspondían con lo que percibía ni sus gastos realizados. Tras concurrir a la sucursal de la entidad bancaria en Roca y consultar los motivos de los descuentos, no obtuvo ninguna respuesta.

Incluso pudo comprobar luego a través del Home Banking, una cantidad de operaciones mensuales de débito por consumos como servicios y pertenecientes a la empresa Sura que figuraban a su nombre.  Al volver a consultar, desde la entidad bancaria le informaron que respondía a un seguro obligatorio que tenían con la aseguradora.

Tras afirmar que nunca contrató tal seguro, la damnificada inició el reclamo por vía administrativa, el cual fue respondido favorablemente. No obstante, los descuentos que existieron durante 2016, 2017 y 2018, y que fueron reconocidos por el banco, nunca se les devolvieron en su cuenta.

El Banco Patagonia no pudo demostrar que la docente había requerido formalmente el servicio, mientras que la empresa Sura se declaró en rebeldía al no responder las intimaciones, por lo que la jueza Andrea de la Iglesia condenó a ambas firmas a indemnizar a la docente por la suma de más de $2.500.000 entre multas, daño punitivo e intereses.