La tensión en Gran Hermano no tiene fin. La pelea entre Mauro y Emmanuel escaló aún más luego de una acalorada discusión en la casa. Ante la intervención de Furia, la situación se desbordó, y Mauro decidió hacer una imitación polémica de su compañero, haciendo alusión a sus problemas de adicción.

Después de un duro enfrentamiento, Emmanuel tuvo la oportunidad de mandar a Mauro a placa gracias al teléfono rojo, lo que avivó el fuego de la rivalidad entre ellos. En respuesta, Mauro decidió imitar a Emmanuel de manera provocadora, generando risas entre algunos de sus compañeros.

La discusión comenzó con un reclamo de Juliana, quien acusó a Mauro de querer que se fuera su amigo. El peluquero no se quedó callado y decidió enfrentarlo con palabras afiladas. Sin embargo, Furia trató de hacerle entender a Mauro que no ganaría el programa y que su enojo solo evidenciaba su propia amenaza. A esto, Mauro respondió diciendo que no le gusta lo que Emmanuel hace.

Emmanuel continuó provocando a Mauro, quien finalmente reveló cuál creía que era el verdadero motivo de conflicto: los celos por su relación con Juliana. Sin embargo, Emmanuel se negó y argumentó que solo muestra expresiones sinceras. La discusión fue aumentando de intensidad hasta que Mauro fue mandado a placa.

Al día siguiente, lleno de rabia, Mauro decidió imitar a Emmanuel en el patio de la casa de Gran Hermano. Aunque no se pudo ver claramente qué gesto hizo, se pudo escuchar que hizo un gesto de esnifar. Dentro de la casa, sus compañeros rieron, pero fuera de ella se desató una gran polémica.

La imitación de Mauro despertó controversia, ya que hizo alusión a la adicción de Emmanuel al cigarrillo y, según una amiga, también a las drogas. Los espectadores se dividieron entre quienes consideraron su acción como una falta de respeto y quienes encontraron humor en la situación.

En medio de tanto conflicto, Gran Hermano se convierte en un escenario de tensiones y diferencias que no dejan indiferentes a los fanáticos del programa. La disputa entre Mauro y Emmanuel parece lejos de terminar, y solo el tiempo dirá cómo se resolverá esta polémica.