Iga Swiatek demostró una vez más su supremacía en la tierra batida al consagrarse campeona del Abierto de Francia por cuarta vez, tercera de forma consecutiva. En una final imponente, la tenista polaca derrotó a la italiana Jasmine Paolini con un abrumador 6-2 y 6-1, consolidando su reinado en el circuito femenino.

La número uno del mundo, quien ya ha dejado su huella en Roland Garros en temporadas anteriores, alcanza ahora la impresionante marca de cinco títulos en torneos de Grand Slam. Swiatek se convierte en la tercera jugadora en la historia del tenis profesional en lograr levantar la Copa Suzanne Lenglen durante tres años seguidos, junto a figuras como Justine Henin y Monica Seles.

 

Con su victoria número 21 consecutiva en París, Iga Swiatek se ubica en el cuarto lugar de las rachas más largas de triunfos en Roland Garros en la era abierta, quedando solo por detrás de leyendas como Chris Evert, Monica Seles y Justine Henin. La joven de 23 años, llegó a la capital francesa en un estado de gracia tras imponerse en Madrid y Roma, y extendió su racha de victorias en tierra batida a 19 partidos, la mejor de su carrera.

Tras el encuentro, Swiatek expresó su emoción: «Es increíble estar aquí, me encanta este lugar. Honestamente, espero cada año para volver aquí. Estuve a punto de quedar fuera del torneo en la segunda ronda, así que gracias a todos por apoyarme y animarme. Ha sido un torneo muy emotivo».

La italiana Jasmine Paolini, duodécima cabeza de serie, no pudo mantener su nivel al inicio del partido y finalmente sucumbió ante la superioridad de Swiatek, quien dominó los intercambios desde la línea de fondo para imponerse en sets corridos. Aunque Paolini logró romper el saque de su oponente al inicio, pronto fue superada por la eficacia de la polaca, quien no dio tregua y se alzó con la victoria de manera contundente.