La trágica muerte de una vecina de la ciudad en un siniestro vial, volvió a poner en el temario público la cuestión de la seguridad, la infraestructura y las medidas defensivas en el tránsito. La roquense Paola Rivas, de 28 años, falleció en un choque múltiple que se produjo en proximidades de Arroyito, sobre la ruta 22, tras perder el control de su vehículo. Volvía de unas vacaciones que terminaron de la peor manera.

La organización Cesvi Argentina, especializada en seguridad vial, realizó un relevamiento estadístico de los siniestros ocurridos en un período de 12 años, entre 2004 y 2016. Allí estimó que la principal causa es el factor humano: el 89,5 % se debió a algún tipo de error de uno de los conductores. El estado de la ruta o las cuestiones climáticas determinaron el 8,8 % de los casos; mientras que una falla del vehículo representó el 1,6 % de los siniestros.

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Para tener en cuenta: la gran mayoría de los siniestros graves que fueron analizados por esta organización se produjeron durante viajes de media y larga distancia. El 51,5 % de los casos se produjo en una ruta nacional; el 25,8 % en una ruta provincial; y 8,2 % en autopista. Solo el 14,5 % de los siniestros reportados ocurrieron en zonas urbanas.

Ese estudio pone el alerta también en sectores que se piensan como muy seguros: el 63 % de los choques se produjo en una recta. El 21 % fue en una curva; el 14 % en una intersección y el 2 % en pendiente.

Esta situación explica que el 32,2 % de los choques haya sido frontal; el 21 % fue fronto-angular; mientras que el 15 % se trató de impactos laterales. También para contemplar la necesidad de respetar la distancia con el vehículo que nos precede: el 12,4 % de los siniestros analizados se debieron a choques por impacto trasero.

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Según este relevamiento, el 88,4 % de los casos analizados durante 12 años se produjo con el pavimento seco. Solo el 9 % de los siniestros se produjo con el asfalto mojado o húmedo. Lo que demuestra que cuando se presta más atención – y se maneja con más prudencia, la probabilidad de que ocurran accidentes se reduce aunque las condiciones sean más complicadas.

La gran mayoría de los siniestros viales se concentró en la zona más densamente poblada del país: las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos sufren el 70,8 % de los casos.

Pero en el quinto lugar de esta siniestra tabla de posiciones figura Río Negro, con el 2,91% de los casos, superando a otras provincias con mayor población, como Mendoza, Corrientes y Misiones, por ejemplo. El mal estado de las rutas, las largas distancias, son factores a considerar en la estadística. Pero también la necesidad de que los conductores tomemos más conciencia a la hora de un manejo más prudente que evite riesgos que pueden ser fatales.