La escuela 357 fue la más afectada del conflicto al recibir 13 balazos en la entrada del establecimiento y contra las paredes del muro de contención. Además, una nota de amenaza a personas aparentemente ligadas al narcotráfico. 

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En lo que va del año, es la segunda vez que los padres toman la determinación de suspender las clases para cuidar la integridad de sus hijos. Dos marchas contra la violencia y una reunión con funcionarios públicos bastaron para gestar medidas en conjunto es pos de garantizar la seguridad.

«Nos vamos conformes para que los chicos puedan volver a clases, nos garantizaron la seguridad dentro del establecimiento» señalaron los padres tras la reunión.

El día viernes los padres que integran la comisión al frente del reclamo, se reunieron tanto con docentes como equipo directivo para evaluar las propuestas y soluciones, con la esperanza de comenzar el lunes las clases.

«Esperamos ver el avance en los próximos días de las investigaciones judiciales» indicó la ministra de Seguridad, Betiana Minor que informó la reubicación de una de las cámaras de monitoreo para visualizar el frente de la escuela, lo cual no solo es útil en materia de prevención sino también como material probatorio para colaborar con las investigaciones judiciales.

Tellería, el Jefe de la Policía de Río Negro, resaltó que se va a continuar trabajando con coberturas y operativos de seguridad: «va a haber una guardia permanente del COER las 24 horas de acá a diciembre; durante el día la Brigada Motorizada cubrirá a las escuela, la sala de salud y el jardín y continuaremos con las tareas de investigación y coordinando con la justicia».

Por otro lado, se informó sobre los avances de obra de la futura Subcomisaría en el barrio Nuevo, para la cual ya se cuenta con su planificación de recursos y personal.