Un llamado al Comando Radioélectrico alertó a la policía sobre la presencia de plantas de cannabis en el baúl de un automóvil. Las autoridades de la Comisaría 7° iniciaron una persecución cuando el conductor del vehículo, en lugar de detenerse, optó por intentar escapar.

Durante la persecución, el individuo arrojó las plantas en un intento de deshacerse de la evidencia, pero fue interceptado antes de poder refugiarse en una vivienda. Paralelamente, se descubrió que las plantas sustraídas estaban relacionadas con un reporte previo de robo, presentado por un propietario autorizado para el cultivo de cannabis.

Con la intervención de unidades especializadas como la Brigada Motorizada de Apoyo y el equipo de Toxicomanía, se logró confiscar las plantas y detener al individuo responsable, siguiendo las directrices de la Fiscalía de turno.