El suceso ocurrió en una casa familiar ubicada en las proximidades del zanjón de Barrio Nuevo. El intruso, un joven delincuente, había ingresado con intenciones de robo en la vivienda. Sin embargo, la familia propietaria de la casa lo sorprendió en pleno acto delictivo mientras intentaba huir con los objetos robados. 

Enfrentando la frustración acumulada por los constantes incidentes de robo en la zona, los vecinos de Barrio Nuevo tomaron la justicia en sus propias manos y sometieron al delincuente a una golpiza.  

«Estamos cansados, viven rastreando bicicletas, garrafas, mangueras, cualquier cosa. Nos roban a nosotros que también somos pobres», expresó con indignación una vecina.  

Según algunos testimonios, incluso los objetos más pequeños, como las zapatillas de los niños de tan solo 5 años, están en peligro de ser robados en plena calle. «A veces dejamos que jueguen descalzos en la vereda por miedo al robo de zapatillas, que ahora es lo que tememos», agregó la vecina. 

El delincuente, tras recibir una serie de golpes contundentes, resultó herido y necesitó atención médica. Se dirigió por sus propios medios a un centro de salud público para recibir tratamiento por las heridas sufridas.