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Una jubilada se encadenó a una constructora de Roca para exigir su casa

Una jubilada se encadenó a una constructora de Roca para exigir su casa
Una jubilada se encadenó a una constructora de Roca para exigir su casa:

Hoy al mediodía una jubilada se encadenó a las puertas de la sede central de la empresa “AZ Construcciones”, ubicada en calle Bolivia al 600. El reclamo de la mujer viene desde hace dos años por las demoras en la edificación de su vivienda. 

 

Según lo relatado, la vivienda la habría adquirido tras firmar un contrato con dicha empresa hace ya dos años. Pero luego de varios meses los trabajos continuaron sin realizarse. A esto, la empresa argumentó que las demoras se debían a causa de la pandemia por Covid-19. 

«Yo la casa la necesito urgente. Soy una mujer muy mayor, estoy en una casilla de madera, de tres metros por seis. Estoy pasando mucho frío», fue lo que contó hoy la damnificada, quien espera hace año y medio concretar esta obra.  «Ya no puedo vivir más así», dijo entre llantos.

 

Después del primer retraso, la obra tendría que haber comenzado en marzo de 2021, pero la postergaron hasta junio. «Hoy no llegaron ni al 20% del total de la casa», enfatizó y recalcó que ya había pagado la mitad de la vivienda, que en aquel entonces apenas supera el millón de pesos.

 

Al mediodía de hoy la mujer arribó desde Senillosa a la ciudad. Una vez aquí, se vivieron momentos de tensión al interior de las oficinas, cuando la clienta ingresó a efectuar su reclamo. Las autoridades de la empresa no se presentaron en el lugar.

 

Al no escuchar su pedido, la damnificada aseguró que va a tomar vías legales e intentará que su caso llegue a la Defensoría Pública.

 

«Ya no puedo aguantar más donde estoy viviendo. No son condiciones para mí, me empeñé en los bancos y los ahorros que tenía, no los puedo recuperar. Quiero que esta gente respete lo que dice el contrato», agregó la mujer que, actualmente se sustenta con la jubilación mínima.

 

Por el momento, vive en Senillosa con su pareja y su hijo, quien no tiene trabajo estable. Viajó 60 kilómetros para exigir la entrega de lo que iba a ser la primera casa propia de su familia.

 

«Yo la voy a pelear la casa hasta la muerte. Mi casa es todo por mí», relató ante los medios este mediodía frente a las puertas de la empresa. Esperaba hablar con el dueño para resolver su situación, aunque es consciente de que hay más de una veintena de denuncias judiciales en la región contra la misma firma, y ya no tiene esperanzas de que cumplan con lo prometido.

Gentileza anr

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