A partir de la denuncia pública de una productora de la zona rural de barrio Malvinas, se pudo constatar las consecuencias de la formación de basureros clandestinos sobre vertientes de agua. El canal secundario norte, es uno de los acueductos más afectados por la continua imprudencia de los vecinos de Roca.

El flagelo de la basura arrojada en lugares no habilitados es una problemática que tiene larga data en la zona rural de barrio Malvinas. En esta ocasión, el impacto de la contaminación se ve aumentado por el vertido de residuos sólidos y domésticos sobre los cursos de agua, los cuales inciden negativamente en las superficies productivas de los sectores rurales.

«El dilema es que la gente usa de basural los cursos de agua del canal secundario norte. Estas son aguas de riego, por lo tanto es indispensable para la gente que tiene sus tierras productivas«, explicó Norma Durante, una vecina y productora de este sector afectado por la contaminación.

LA COMUNA pudo acceder a una de las chacras afectadas por estos basurales clandestinos y se pudo observar una gran cantidad de residuos de origen domésticos que obstruyen la circulación en los canales internos.

Entre la basura dispersa, se pudo reconocer objetos como botellas, pañales, cajas tetrabrik, latas, bolsas, cartones, hasta residuos de gran tamaño como viejos y deteriorados asientos de vehículos. Los vecinos aseguraron que, frecuentemente, suelen encontrarse animales muertos.

«No hay parámetro de lo que te podés encontrar acá, hasta perros y gatos muertos hemos tenido que retirar en esta zona. Si bien, no utilizamos esta agua para uso doméstico, se que hay familias para el lado de Cervantes que es el único recurso que tienen. La gente no sabe que contaminar los cursos de agua es un delito», afirmó la productora.

Esta vecina manifestó que, el malestar que se produce a raíz de estos hechos de contaminación, se comparte entre los chacareros.

Además, otro de los dramas que describieron los productores son los focos de basura que se encuentran sobre la calle Panamá, los cuales generan basurales a cielo abierto.

A través de una recorrida que realizó este medio, se pudo corroborar la existencia de distintos focos de restos de basura doméstica apilada, arrinconada y/o extendida sobre las banquinas.

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«Campañas de concientización en vano»

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Vanesa Funes, gerente del Consorcio de Riego de Roca, sostuvo que la proliferación de los hechos contaminantes sobre los cursos de agua, es una realidad que como ente los supera día a día. «En la medida que podemos, vamos retirando la basura urbana», aseguró.

«Desafortunadamente muchas veces somos los que tenemos que hacernos cargo de la irresponsabilidad del otro. Nos esforzamos por realizar campañas de concientización pero aún son todas en vano«, se lamentó Funes, quien aseveró tomar conocimiento de esta situación, a través de este medio.

Desde el Consorcio de Riego, anticiparon que durante el transcurso de la jornada de hoy, se realizarán las tareas de limpieza a fin de solucionar esta problemática generalizada en esta zona productiva.