Con miles de trabajadores y estudiantes desplazándose a diario para cumplir con sus responsabilidades, el transporte público se convierte en una pieza fundamental en sus vidas. Sin embargo, esta necesidad básica se ve afectada por un incremento significativo en los costos. 

El reciente aumento en las tarifas del transporte ha impactado considerablemente en los bolsillos de quienes deben viajar distancias superiores a los 10 kilómetros, llegando a alcanzar un aumento del 100%.

Para poner en contexto esta situación, si consideramos el caso de un residente de General Roca que viaja de lunes a viernes a Neuquén para trabajar o estudiar, los gastos mensuales podrían ascender a la considerable suma de $118.217. 

Si tenemos en cuenta el monto del Salario Mínimo Vital y Móvil, que asciende a $202.800, vivir con un trabajo y viajar no es posible. 

Ante esta situación, varios grupos en Roca han comenzado a buscar alternativas más económicas y colaborativas para movilizarse. La organización de viajes en vehículos particulares, con el consiguiente reparto de los costos del combustible entre los pasajeros, se está convirtiendo en una estrategia popular para hacer frente a la crisis económica que afecta a la población argentina. 

En tiempos de desafíos económicos, la solidaridad y la cooperación entre los ciudadanos se erigen como herramientas indispensables para afrontar las adversidades que impactan en el día a día de la sociedad.