A media tarde del domingo electoral, una breve pero fuerte tormenta azotó la ciudad dejando la tranquilidad de lado para vecinos que concurrían a las escuelas a votar.

Todo quedó pasado por agua, incluso la guardia del Hospital Francisco López Lima de nuestra ciudad.

El techo de la guardia se llovió todo. Fue en el sector donde los profesionales de la salud hacen la primer atención a quienes llegan a atenderse, en la zona de camillas. El agua caía a chorros.

«Se filtra el agua por los techos, literalmente llueve adentro de la guardia» manifestaron los trabajadores del lugar.

«No es algo nuevo. Las deficiencias edilicias las venimos denunciando hace meses. Las condiciones de trabajo son paupérrimas y muchas veces constituyen un riesgo no solo para los trabajadores sino para los usuarios» denunciaron desde Asspur.

El cuestionamiento al gobierno de Arabela Carreras en materia de salud ha sido de los más reiterados, no sólo en este último tiempo donde hubo manifestaciones por parte de ATE, sino también a lo largo de gran parte de su gestión, con una serie de paros por parte del personal hospitalario.

A media tarde del domingo electoral, una breve pero fuerte tormenta azotó la ciudad dejando la tranquilidad de lado para vecinos que concurrían a las escuelas a votar.

Todo quedó pasado por agua, incluso la guardia del Hospital Francisco López Lima de nuestra ciudad.

El techo de la guardia se llovió todo. Fue en el sector donde los profesionales de la salud hacen la primer atención a quienes llegan a atenderse, en la zona de camillas. El agua caía a chorros.

«Se filtra el agua por los techos, literalmente llueve adentro de la guardia» manifestaron los trabajadores del lugar.

«No es algo nuevo. Las deficiencias edilicias las venimos denunciando hace meses. Las condiciones de trabajo son paupérrimas y muchas veces constituyen un riesgo no solo para los trabajadores sino para los usuarios» denunciaron desde Asspur.

El cuestionamiento al gobierno de Arabela Carreras en materia de salud ha sido de los más reiterados, no sólo en este último tiempo donde hubo manifestaciones por parte de ATE, sino también a lo largo de gran parte de su gestión, con una serie de paros por parte del personal hospitalario.

A media tarde del domingo electoral, una breve pero fuerte tormenta azotó la ciudad dejando la tranquilidad de lado para vecinos que concurrían a las escuelas a votar.

Todo quedó pasado por agua, incluso la guardia del Hospital Francisco López Lima de nuestra ciudad.

El techo de la guardia se llovió todo. Fue en el sector donde los profesionales de la salud hacen la primer atención a quienes llegan a atenderse, en la zona de camillas. El agua caía a chorros.

«Se filtra el agua por los techos, literalmente llueve adentro de la guardia» manifestaron los trabajadores del lugar.

«No es algo nuevo. Las deficiencias edilicias las venimos denunciando hace meses. Las condiciones de trabajo son paupérrimas y muchas veces constituyen un riesgo no solo para los trabajadores sino para los usuarios» denunciaron desde Asspur.

El cuestionamiento al gobierno de Arabela Carreras en materia de salud ha sido de los más reiterados, no sólo en este último tiempo donde hubo manifestaciones por parte de ATE, sino también a lo largo de gran parte de su gestión, con una serie de paros por parte del personal hospitalario.