El denominado «Vuelo de bautismo», permite a los pasajeros recorrer la ruta del valle, despegando desde el aeropuerto Arturo U. Illia y adentrándose en el centro de Roca. Maximiliano Manzini, instructor del Aeroclub, comenta que desde el centro se dirigen hacia el sur, “pasando por Stefenelli, APICAR y el Puente Paso Córdoba». 

Una vez sobrevolado Paso Córdoba, llega el momento de descubrir uno de los atractivos turísticos más destacados de la ciudad, ya que el itinerario incluye los impresionantes Valles de la Luna y las Tres Cruces. «Si el tiempo nos lo permite, incluso podemos sobrevolar la casa de los pasajeros. Los recorridos son flexibles, lo que significa que podemos adaptarnos a las preferencias de los pasajeros dentro del tiempo de vuelo establecido», agrega Maximiliano, quien ha sido testigo del enamoramiento de muchas personas con la experiencia de un vuelo de bautismo. 

 

 

 

 

 

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Estos vuelos tienen una duración aproximada de 25 minutos y, hasta la fecha actual, tienen un costo de $6,000 por persona. Se trata de una actividad ideal para disfrutar en familia, por lo que el Aeroclub invita a la comunidad a sumarse y vivir esta experiencia inolvidable. Para coordinar el día y horario del vuelo, los interesados pueden comunicarse a través de la cuenta de Instagram del Aeroclub. 

Además de los vuelos mencionados anteriormente, el Aeroclub cuenta con una flota de cuatro aeronaves. Entre ellas se encuentran el Cessna 172M y el Piper PA28 Archer, utilizados para las travesías, y el Cessna C150 y el Piper PA38 Tomahawk, destinados a la instrucción de vuelo. 

En este sentido, el Aeroclub está ofreciendo cursos para obtener la licencia de Piloto Privado de avión, que constituye el primer paso en la formación de todo piloto. Esta licencia capacita para operar como comandante de aeronaves de hasta 5,700 kg. 

El curso consta de 40 horas de vuelo y una parte teórica que se desarrolla a lo largo de la actividad. Una vez completadas las 40 horas mínimas de vuelo establecidas por la autoridad aeronáutica competente, el aeroclub «presenta» al aspirante a piloto ante un inspector de la ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil), quien administra exámenes teóricos en áreas como meteorología, aerodinámica, espacios aéreos, medicina aeronáutica y otros conocimientos relevantes. 

Superada la prueba teórica, los aspirantes deben realizar un examen práctico, que consiste en una serie de maniobras normales y anormales relacionadas con la operación de la aeronave. Las inscripciones están abiertas durante todo el año para aquellos interesados en convertirse en pilotos.