En Neuquén comenzó a implementarse una ley que prohíbe la exhibición de alimentos ultraprocesados en las líneas de cajas de supermercados, farmacias y autoservicios. El objetivo es bajar la incidencia del sobrepeso, obesidad y enfermedades derivadas. Río Negro estableció una legislación similar hace dos años y medio y fue pionera en ese sentido.

La ley neuquina establece intervenciones que estimulan mejores hábitos alimenticios, promoviendo particularmente la reducción del consumo calórico excesivo y de la ingesta de dulces en general, según explicó el Gobierno.

Río Negro fue la primera en aprobar una legislación que aleja los alimentos hipercalóricos de la línea de cajas en los grandes centros de venta. En agosto de 2019, la legislatura provincial aprobó por unanimidad la iniciativa que prohibió la exhibición de golosinas y bebidas con altos contenidos de azúcar o de jarabe de alto fructuosa en las líneas de caja de los supermercados. También estableció que la autoridad de aplicación de la norma es la Dirección de Defensa del Consumidor, que en General Roca tiene una delegación (9 de julio y España).

Para realizar alguna denuncia, los vecinos de la ciudad podrán mandar un correo electrónico a [email protected] o al teléfono 0298 – 4782546. Por otra parte, en el sitio web de la dirección (defensadelconsumidor.rionegro.gov.ar) se puede consultar las distintas dudas que se pueden presentar o completar el formulario para realizar la denuncia on line.

La ley rionegrina fue impulsada por el legislador barilochense Leandro Lescano (Juntos Somos Río Negro), y fue promulgada el 6 de agosto de 2019. Hoy dedicada a su profesión particular, Lescano precisó que la iniciativa buscó “disminuir la tasa de obesidad que se estaba registrando en los diferentes centros de salud de la provincia”. Estos alimentos con altos contenidos de azúcar generan un doble fenómeno: por un lado, un consumo casi adictivo; y una ingesta desproporcionada de calorías para el cuerpo.

Esta ley prohíbe la oferta de todo tipo de alimentos y bebidas “con alto contenido de azúcar o jarabe de maíz de alta fructosa, en proximidades inmediatas y de hasta tres metros de cajas registradoras en supermercados e hipermercados”.

Lescano recordó que en Río Negro y Neuquén “la mitad de los chicos de 6 a 19 años tiene problemas de sobrepeso y obesidad, según una encuesta realizada por el ministerio de Salud de la Nación”. Esto refleja “lo que ocurre y la gravedad que hay en estas dos provincias”. También precisó que la solución no pasa por eliminar la venta de productos, pero alejarlos de la línea de caja – que es el momento de espera donde el consumidor muchas veces compra sin pensar -, “es un paso más para la visibilización y concientización que tiene este flagelo”.

La Cámara Argentina de Supermercadistas (integrada por las principales cadenas de super e hipermercados del país), anunció su intención de judicializar la norma, considerándola un “ataque a la libertad de comercio”. Lescano rechazó ese argumento, explicando que en vez de considerarlo un tema de “derecho comercial” debía entendérselo “como una cuestión de derecho a la igualdad, de derecho a la salud”.